¿Recuerdas la escena que tu mamá te contaba los cuentos antes de dormir cuando tú eras un niño? Es una buena memoria imborrable.
En realidad, las madres cuentan los cuentos a sus hijos con el propósito de que los niños aprendan también. Se considera que contar los cuentos es no solo una manera de divertir sino un método de aprender. Los niños se atraen y se lanzan a lo que está pasando en los cuentos. Gracias a la forma natural de presentar el lenguaje nuevo y a los contenidos multiculturales, los niños han aprendido mucho inconscientemente.
Los cuentos sirven para una gran variedad de estilos de aprendizaje, los cuales hacen el proceso de aprendizaje más atractivo. Se puede estimular la imaginación y practicar la lengua si cuenten los cuentos usando una manera adecuada.
Además, la mayoría de los cuentos nos da las razones implícitamente. A los niños les no hace falta entenderlas desde los guirigayes sino sentirlas y madurarse en un contexto concreto.
Por lo tanto, es necesario y acertado aprovechar los cuentos, y después, verás el gran progreso de los niños, en todos los aspectos.

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